Te presentamos algunos tips que te ayudarán a hacer una selección adecuada de tu nuevo calefactor.

Calefactores de gas

Los calefactores de gas son eficientes, poco contaminantes y no representan riesgos, salvo los causados por equipos en mal estado o por su uso inadecuado. Sin embargo, debes considerar que cada sistema de calefacción a gas, ya sea licuado o LP, presenta ventajas y desventajas en relación con el costo, consumo y almacenamiento del gas.

Calefactores eléctricos

Por otro lado, los calefactores eléctricos poseen otras cualidades: no son contaminantes, son más seguros y no requieren de una instalación de gas; funcionan con suministro constante de energía, aunque si bien es un poco más cara.

Este tipo de calefactores se recomienda para espacios pequeños como dormitorios, salas y oficinas y producen calor por conducción, radiación o por convección.

Cada tipo de calefactor eléctrico presenta ciertas características que debes conocer en caso de que optes por calentar tu hogar con uno de éstos.

• De placas radiantes: Cuentan con sistemas de seguridad que cortan el paso de electricidad al detectar sobrecalentamiento o fallas en el circuito.

• Oleoeléctricos: Están equipados con aceite y una resistencia eléctrica que calienta el aceite y las placas que lo contienen, las cuales al calentarse hacen circular el aire que las rodea. No se recomienda su uso en baños ni otros lugares con mucha humedad y se debe tener cuidado de no cubrirlas.

• Convectores eléctricos: Producen calor por convección a partir de la circulación de corriente a través de la resistencia ubicada en su parte inferior; se recomienda su uso en ambientes pequeños, sin mucha humedad.

• Calefactores de halógeno: A través de sus barras halógenas, que son ampolletas con gas, irradian calor. Su principal característica es la seguridad ante el roce o contacto directo con la rejilla protectora y no contaminan ni consumen oxígeno de la habitación.

• Calefactores de cuarzo: Emiten calor a través de sus barras, que son ampolletas con filamentos. Su principal característica es la rapidez con que entregan el calor, no contaminan y no consumen oxígeno, pero no se deben cubrir sus rejillas para evitar accidentes.

• Termoventiladores: Calientan por convección, a través de sus resistencias de alambre. El calor producido es disipado a través de las rejillas frontales por medio de un ventilador. No se debe mojar ni cubrir para evitar accidentes.